El secreto detrás de las versiones Harlequin de Volkswagen es un intrigante viaje a través de la historia del diseño automotriz y la creatividad publicitaria. Los Volkswagen Harlequin, reconocidos por su inusual pintura de colores aleatorios, han capturado la atención de entusiastas y curiosos por igual.
Desde sus humildes comienzos en la década de 1960 con el icónico Beetle, hasta su resurgimiento en los años 90 con modelos como el Polo y el Golf, estos vehículos han sido testigos de la fusión entre la exclusividad y la extravagancia. A pesar de sus opiniones polarizadas y su relativa rareza en las calles, el legado del Harlequin perdura, sugiriendo que la magia del color siempre encontrará su camino de regreso a las carreteras, tal como lo insinúa el reciente lanzamiento de un prototipo del nuevo Polo en una explosión de tonalidades vibrantes.
¿Será este el regreso triunfal de una de las creaciones más distintivas de Volkswagen? Solo el tiempo lo dirá, pero una cosa es segura: la fascinación por el Harlequin nunca desaparecerá por completo.
Difíciles de encontrar y ver personalmente. No así en imágenes, seguro alguna vez en tu vida has visto algún Volkswagen Harlequin (Arlequín en español), sea un Golf, o un Polo en europeo o un Gol o un Escarabajo de Latinoamérica.
Complejos de digerir si los miramos con los anteojos de la sobriedad del diseño alemán, pero a su vez, atractivos desde la exclusividad. El nombre viene de arlecchino en italiano, que es el personaje más popular de la comedia del arte, aparecida siglo XVI, pero cuyo origen tiene lugar en la Edad Media.
¿Pero, de donde sale la idea de pintar un auto de diferentes colores de manera aleatoria?
El primer paso lo dio una publicidad del VW Beetle de 1964, en que habla que la intercambiabilidad de piezas no sin importar el modelo (algo que hoy sería un mensaje negativo donde la customización y la diversidad son herramientas de venta). Un guardabarros verde de un ´58, un capot azul de un ´59, otro guardabarros beige de un ´64, una puerta color turquesa del ´62…
Incluso en 1966 aparecieron fotos del Beetle Harlequin en USA en la revista Small World Magazine en el concesionario Don Corlett Dealership en Louisville, Kentucky.
Pasaron 30 años desde la publicidad del Escarabajo para volver a ver un Arlequín, y esto fue con el Volkswagen Polo Mk3, en una mezcla de colores (Rojo Flash, Amarillo Ginster, Verde Pistacho, Azul Chagall), con una serie de 1000 unidades, la gente se daba vuelta para mirarlo, para llegar a 3800 hasta 1998. Hoy un incono de los 90s.
Frente al éxito del Polo, los directivos desde Wolfsburgo arriesgaron en el segmento C con el Volkswagen Golf Mk3 para los mercados de USA y México con apenas 264 unidades en 1996. Claro era otro segmento y otro público.
La moda Arlequín llegó igualmente a Sudamérica en 1996, y con el nombre de Volkswagen Gol Top, fabricados en Brasil se vendieron en la región, llegando a Argentina. Aquí como en el resto del mundo, generó amor y odio sin intermedios. Los primeros en circular causaban sensación, los propietarios llenos coraje era observados en su transito por la cuidad. Como cualquier auto “distinto” al poco tiempo perdieron valor respecto a la versión “normal”.
En México también en el ´96 el Vocho aparece una breve serie limitada de 141 autos en modo Arlequín. – ver también –
Volkswagen tiene ese naipe exclusivo bajo la manga, hoy es la única marca que puede jugarla. Parece que en el frio del enero europeo de 2021 entre pandemia y días grises, VW volvió a a traer color con un show car del nuevo Polo.
En 2024, el pasado lunes 1 de abril, mientras algunos países celebraban el Día de los Inocentes April Fools’ Day, Volkswagen en Reino Unido decidió jugar una broma con nuestros sentimientos al «anunciar» el lanzamiento del Electroluminescent ID.3 Harlequin Edition, una supuesta versión inspirada en los Arlequín.
Se fabricará en serie limitada? El tiempo lo dirá, pero desde la marca dicen que no. Yo creo que el Arlequín siempre volverá, es solo cuestión de tiempo.
Textos: © Ing. Dario Bakus
Fotos: © TargaSport
0 comentarios